Pensamientos sobre el Verso de Hoy
Eso sí que es mucha distancia: desde el oriente al occidente, así de lejos Dios ha alejado nuestros pecados. Pero la palabra clave es “alejado.” Cuando pecamos y nos volvemos a Dios en arrepentimiento, Dios no sólo perdona nuestro pecado; nos purifica de toda injustica. Lo que era injusto en mí, lo ha hecho justo en Él. Lo que era impuro ahora es limpio. Lo que estaba manchado ahora está pulcro. ¿Por qué? ¿De qué manera? Podemos ver ahora mejor lo que el salmista sólo pudo saber en parte. Dios no ve nuestros pecados, sino el sacrificio de Jesús. Su sangre nos purifica y nos limpia Nuestro pecado ha sido quitado y estamos limpios.
Thoughts on Today's Verse...
Now that's a long way — from the sun's rising to the sun's setting, that's how far God has removed our sins. But the keyword is removed. When we sin and come to God in repentance, God not only forgives our sins; he also purifies us of ALL unrighteousness. What was unholy in me is made righteous in him. What was impure is now clean. What was stained is spotless.
How is this possible? God gives us grace in Jesus![1]
We can now see more fully what the Psalmist could have only known in part. God doesn't see our sins but Jesus' sacrifice. Jesus' blood purifies and cleanses us! Our sin is gone, and we are clean.
[1] Paul describes our new identity, in Christ, in Colossians 1:22: But now [God] has reconciled you by Christ's physical body through death to present you holy in his sight, without blemish and free from accusation...
Mi oración
Padre de misericordia, gracias no sólo por perdonar mis pecados, sino por quitarlos. Te agradezco porque puedo presentarme delante de ti santo y sin falta por la sangre de Jesús y su deseo de perdonar. Ahora te pido, Padre Justo, que me fortalezcas con tu Santo Espíritu para que mi conducta refleje cuánto me valoras en Cristo. En el nombre de Jesús, tu Hijo y mi Salvador. Amén.
My Prayer...
Father of mercies, thank you for forgiving my sins and removing them. I thank you that I can stand before you holy and without fault because of the blood of Jesus and your gracious desire to forgive me. I now ask, Righteous Father, that you strengthen me with your Holy Spirit so that my conduct will reflect your estimate of me in Jesus. I pray in the name of Christ Jesus, your Son, and my Savior. Amen.